…en mi deambular lento pero decidido por el camino, veo sentado sobre una piedra en el borde a un anciano que descansa, paso junto a él, y en el cruce de nuestras miradas, le presiento, poco a poco ralentizo la marcha, y pienso…esa mirada me es familiar, pero no puede ser, él se fue hace ya mucho, continuo la marcha vuelvo la vista atrás, ya no está, ha desaparecido, y pienso si no es un guiño de mi subconsciente para decirme que aún su recuerdo mora dentro de mí, sus risas, sus reprimendas, su tesón para convertirme en un hombre de provecho, su lucha diaria para ayudarnos a crecer, me reconforta saber que al final de mi camino el estará esperándome y ya no habrá mas separaciones, el sol está en todo lo alto, y el murmullo del agua cercana de un arroyo, despierta en mí un poco de sed…